Lo más urgente es mejorar la calidad
de las aguas de los estanques.

Plan de Mejoras en el Parque
de Isabel La Católica

Por Ana I. Martín.

 

Están a punto de finalizar las obras anunciadas en el mes de agosto del año pasado y que están siendo ejecutadas con un presupuesto inferior al indicado en aquella fecha. Veamos. La poda de los alrededor de 50 chopos fue salvaje, probablemente de no contar con la motosierra no habría sido tan drástica. ¿Ningún ejemplar se podía salvar aplicando el tratamiento adecuado? El diseño de las nuevas rosaledas no mejora al anterior, ahora hacen falta los rosales. Los bancos son sencillos, poco agraciados; eso sí, están más seguros y parecen algo más cómodos que los que sustituyen. Las farolas sí han ganado en estilo a sus antecesoras.

Centrándonos en las aves, que creo son su mayor atractivo, la ampliación del estanque pequeño mejora el bienestar de las que pueblan esa zona. Ahora bien, para los usuarios del parque y, sobre todo, para las aves, los cercados no son nada amables.

Hay algo fundamental que no contemplaba el Plan de Mejoras, pero que es de sentido común. Se trata del control de calidad de las aguas y lodos de estanques y canales. Estanques y canales distan mucho de la bandera azul, es frecuente el hedor y el desprendimiento de masas costrosas, amén de la turbidez. Por otra parte, la lámina de agua, p.ej. en el estanque grande, no sobrepasa los 40 ó 50 cm. de profundidad y reposa sobre una capa de sedimentos de espesor muy superior. Se trata de aguas estancadas y poco profundas, que unido a un verano seco y caluroso son proclives para caldo de cultivo, de nuevo, de la bacteria botulínica. Las lluvias, escasas y débiles, no son el remedio. El dragado es la mejor solución, pero ésta no es la mejor época. No obstante, apunto, amén de introducir agua, dos procedimientos de bajo coste que contribuirían al enfriamiento y el aporte de oxígeno: instalación de bombas e insuflar aire como hacen en los acuarios. No olviden la laguna del Pueblo de Asturias. Las aves del parque ya han sufrido un consentido y más que prolongado azote.

También se precisa mejorar el sistema de desagüe, ya que las lluvias pueden sorprender, como sucedió el día 13 de junio, dejando en el parque un espectáculo lamentable. Las aguas fecales, con su fetidez y sólidos, anegaron varios puntos y faltó poco para que entraran en la pajarera. Tampoco están de más, el desbroce más frecuente de la maleza de los estanques y la recuperación del terreno (nivelación) y el césped de los mismos. Otro aspecto a tener en cuenta es incrementar la vigilancia para evitar los rastreros sabotajes a los cercados y otros desmanes clásicos como las pintadas.

Considero que las mejoras que indico son básicas y necesarias. Tengamos también un parque histórico de primera.